El Municipio de Avellaneda tiene su origen en la fundación de la ciudad el 18 de enero de 1879 por un grupo de familias italianas en base a la Ley de Inmigración y Colonización promulgada por el presidente argentino Nicolás Avellaneda, instalandosé en la margen izquierda del arroyo El Rey, dedicándose principalmente a la actividad agrícola. Los primeros inmigrantes construyeron sus viviendas con los materiales disponibles en la naturaleza. El trabajo, la unidad familiar y los principios cristianos fueron fundamentales para superar las adversidades. En agosto de 1879, el Coronel Manuel Obligado enviado por el Gobierno Nacional para proteger la región de los indígenas, propuso nombrar al pueblo en honor al presidente Nicolás Avellaneda. Además de la zona urbana los parajes en la zona rural son: La Vertiente, Avellaneda Oeste, El Carmen, Moussy, Santa Ana, El Timbó y La Colmena. Su ubicación sobre la RN 11 posibilita la unión del norte con el sur argentino, facilitando las conexiones con los países limítrofes miembros del Mercosur. Reconocida como uno de los centros industriales más significativos del norte argentino, se caracteriza por albergar una variedad de establecimientos fabriles que procesan principalmente materias primas agrícolas. Históricamente, Avellaneda también contó con desmotadoras de algodón, aunque en la actualidad solo una de ellas sigue en funcionamiento debido a cambios en el cultivo y migración de la actividad. Además el sector agropecuario desempeña un papel importante en el distrito, con extensas hectáreas dedicadas a la agricultura, en particular la soja, que tiene un peso relevante en las tierras cultivadas de la región.
La idea central se asienta sobre una figura representativa de un trazado urbano, estilo damero español, característico de un asentamiento poblacional americano, sea urbano o rural. El azul configura los colores del Río Paraná y del Arroyo El Rey, fuentes de vida para nuestros pobladores costeros. La estrella de color celeste representa los colores patrios que simbolizan el amparo que le brinda la nación argentina a la ciudad. La estrella de color rojo completa los colores de la insignia provincial. El color verde del rectángulo inferior derecho representa la riqueza del suelo, el verde de nuestras plazas, calles y paseos y también la exuberante vegetación de nuestros montes e islas. También simboliza el compromiso permanente de la gente en favor de la protección del medio y la conservación y ampliación de los espacios verdes del distrito. Las estrellas simbolizan "lo elevado", lo que está más cerca del cielo, de la gloria, por lo tanto que es el signo más apropiado para encarnar las ambiciones e ideales de la población de Avellaneda. Por historia sabemos que los primeros pobladores de esta colonia levantaron sus viviendas en las esquinas de sus lotes, lo más cerca unos de otros, para defenderse de los peligros que les presentaba un medio hostil y desconocido como era entonces. Las cuatro estrellas agrupadas en el centro mismo de la bandera significan esa cercanía, esa necesidad de protección mutua entre vecinos. Así como antes lo hicieron los colonos, hoy y siempre, los vecinos de Avellaneda se protegen mutuamente y juntos enfrentan las dificultades y desafíos propios de la vida comunitaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario