La provincia de San Luis es una de los veinticuatro estados federales que conforman la República Argentina. Se ubica en el sureste de la región del Nuevo Cuyo, al oeste del país. Su capital y ciudad más poblada es San Luis y su régimen municipal es ejercido por gobiernos locales denominados municipios. Tiene una población de aproximadamente 543.000 habitantes y una superficie de 76.748 km². Presenta dos ambientes distintivos: al norte, un paisaje serrano en las Sierras Pampeanas, y al sur, un relieve llano. Las sierras se dividen en tres encadenamientos, separados por valles planos. El primero incluye la sierra de Comechingones, con el Cerro de las Ovejas como punto más alto, y las sierras de Tilisarao y de la Estanzuela. El segundo grupo son las Sierras de San Luis, con cerros volcánicos como el Sololosta y el Tomolasta. Hacia el oeste, hay un tercer grupo de sierras erosionadas, como las de Guayaguas y de las Quijadas. Entre estas sierras y las de San Luis se encuentra una depresión ocupada por la Pampa de las Salinas y la Salina del Bebedero. La mitad sur de la provincia es plana, con pastos duros y lagunas, limitando con la llanura pampeana hacia el este y con la región cuyana hacia el oeste, donde predomina la estepa arbustiva y bosquecillos de caldén. En general, el clima es continental seco, con una temperatura media anual de 17 °C. Las lluvias son escasas y disminuyen de este a oeste, concentrándose principalmente en verano, entre octubre y marzo. En invierno, las precipitaciones son casi nulas, y puede nevar en las sierras por encima de los 1000 m s. n. m. En la zona serrana, el bioma es árido, aunque en las laderas orientales se desarrolla un bioma templado serrano más húmedo. El valle de Conlara tiene un microclima especial con alta ionización negativa del aire y alto contenido de ozono, con efectos beneficiosos para la salud. En las sierras, nacen arroyos que alimentan los ríos Conlara y Quinto, siendo este último el único que desemboca en el río Salado, en Buenos Aires, durante grandes crecidas. Embalses se aprovechan para energía hidroeléctrica, regular caudales y suministrar agua para riego y consumo humano. La provincia enfrenta sequías recurrentes, lo que lleva a medidas de emergencia hídrica para priorizar el uso del agua para necesidades básicas. Además, el río Desaguadero marca el límite occidental de la provincia y sufre una grave merma de caudales, afectando las lagunas y ríos de la región. La fauna incluye mamíferos como pumas, gatos monteses, zorros grises, vizcachas, guanacos y venados, estos últimos en peligro. Hay una variedad abundante de aves, como teros, cardenales, reina mora, y el cóndor andino. Los anfibios son escasos y los reptiles incluyen lagartijas y la boa de las vizcacheras. Las aves acuáticas y peces como el pejerrey y la carpa también están presentes. La flora se divide en tres zonas: monte, chaco occidental y una faja de transición. En el monte se encuentran jarillares, retamas y especies endémicas como la chica y el solo. En las zonas de suelos arenosos surgen gramíneas, matorrales y árboles como quebrachos, algarrobos y chañares. En las sierras altas y húmedas crecen molles, talas y chañares, con presencia de palmares caranday en ciertas áreas.
El Gobernador José Gregorio Calderón, dispuso por decreto del 27 de diciembre de 1836 establecer un sello oficial para la provincia con el siguiente diseño: en el centro, la imagen de tres cerros representando las minas de oro de La Carolina, luego abandonadas, y como complemento, un sol naciente y un animal cuadrúpedo mirando el sol. De este modo, el sello reunió los elementos básicos del escudo provincial: los cerros, el sol y el animal. El sello, cuyo diseño original era del general José Ruiz Huidobro, incluía las siguientes frases: "La provincia de San Luis al General Rosas" y "Gratitud eterna, por su existencia y libertad". En 1852 una ley acortó la inscripción escrita, quedando solo la expresión "La provincia de San Luis". A partir de 1862 comenzó a utilizarse un nuevo escudo en el que aparecen cuatro cerros, un sol naciente entre el tercer y cuarto cerro, dos venados enfrentados en la mitad inferior, bordeado por ramas de laurel en forma oval y la expresión abovedada de "Gobierno de San Luis". Los venados son un símbolo del nombre originario del territorio, Punta de los Venados, de donde viene el gentilicio provincial de puntano. Este escudo fue utilizado en las siguientes ocho décadas, aunque la falta de una norma hizo que el mismo tuviera diferencias de detalle y diseño. Por esta razón, en 1939 la Ley N.º 1640 precisó las características del escudo, sin alterar los elementos con los que venía siendo representado desde 1862, aunque omitió establecer los colores. Con fecha 24 de octubre de 1969, el Archivo Histórico de la Provincia produjo el Informe Histórico Nº 106, detallando las características de cada elemento del escudo de San Luís. La omisión sobre los colores de cada elemento fue resuelta por Decreto N.º 800/1978, convalidando la disposición realizada por el Ministerio de Gobierno y Educación.
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